Fragmento – Serie Cielo Azul
Quien iba a imaginar que la tercera guerra mundial se iba a librar de una⁣ manera no convencional y contra un oponente inimaginable. Una especie de alien microscópico, silencioso y voraz, capaz de atemorizar al mundo entero. Capaz de cerrar todas las fronteras y desafiar a todos los gobiernos y a todas las ideologías y a todos los credos, y contra cuyo invisible y galopante ejercito no sirven para nada las armas convencionales ni los⁣ miles de millones de dólares invertidos en la tecnología más avanzada de las artes del exterminio.⁣
⁣Quién iba a imaginar que toda la humanidad iba por fin a estar unida⁣ padeciendo la misma incertidumbre y el mismo horror. Lo que no había⁣ logrado nada ni nadie, ni el profeta más audaz, lo ha logrado el miedo.⁣
⁣No obstante, las oscuras predicciones para las cuales no es necesario ser ni astrólogo ni mago, lo que quedará después de esta guerra, si nos quedan alientos para verlo, será un brillante paisaje sin ruinas: un mundo dividido sin los destrozos tradicionales después de la batalla. Un mundo dividido en el que los más derrotados, además de las vidas perdidas y sus dolientes, serán los sistemas dominantes que gobiernan. El mundo quedará dividido⁣ entre quienes aprendieron bien la lección y tomaron a tiempo los apuntes en esta implacable cátedra viral, y aquellos que pretenderán continuar como si todo pudiera volver a ser igual.⁣
⁣Creo, y es lo que deseo, que el mundo desde ya se está haciendo más poético. Esa cercana latencia de la muerte lubrica la sensibilidad: nos hace más creativos, despertando sentimientos inusuales que dan tibieza a semillas congeladas. Sorprendiendo como lo hace la oruga en ese silencioso e íntimo paso a la crisálida, guardándose en un mutismo sorprendente al que sólo, y únicamente, llega la voz de la vida dando la orden de volar.

Pedro Villalba Ospina
@taller_bosqueprimario